La cirugía podológica vive continuos avances en técnicas quirúrgicas y medios diagnósticos

Las clínicas podológicas especializadas en cirugía podológica, constan de un equipo multidisciplinar, integrado por médicos, podólogos, técnicos ortopédicos, diplomados en enfermería y otros colaboradores con amplia experiencia y conocimientos en el tratamiento del pie.

El carácter científico y medico de estos centros, permite detectar situaciones de riesgo en el pie (diabetes, artritis, insuficiencias vasculares…). Antes de cada tratamiento se hace un diagnóstico de la salud podológica del paciente y se determina el más adecuado, que puede ser de Cirugía, de Biomecánica o de Podología.

La cirugía podológica ambulatoria constituye el tratamiento de vanguardia en las deformidades dolorosas del pie, goza de gran actualidad, reporta unos beneficios al paciente, proporciona una atención más personalizada, altera mínimamente el modo de vida del paciente, crea menor ansiedad, disminuye el riesgo de infección hospitalaria y permite una más pronta recuperación y reincorporación al medio familiar habitual.

Entrevistamos a dos especialistas, al doctor Rafael Benegas, y al podólogo Jesús Carvajal, para que nos respondan a las preguntas más demandadas.

¿Qué es la cirugía del pie?

La cirugía podológica difiere de otras cirugías por las especiales características y funciones de la extremidad inferior. Además de soportar nuestro peso, el pie sufre en cada paso la presión del zapato y el golpe con el suelo. Conseguir la mejor funcionalidad posible del pie es uno de los factores principales de la cirugía podológica. Nuestro equipo quirúrgico con más de diez años de experiencia, viene aplicando las técnicas quirúrgicas más contrastadas en cada patología.

¿Cuales son las causas de los problemas en el pie?

Hay dos clases de problemas: unos congénitos y otros adquiridos. Los congénitos aparecen al nacer, heredándose el tipo de pie que predispone al juanete. Los adquiridos son consecuencia del calzado inapropiado, stress físico, lesiones y traumatismos, artritis y la modificación del equilibrio dinámico del pie que empeoran con la edad. Las mujeres, debido al tipo de calzado que usan, sufren más esta patología.

El hallux valgus es la patología más frecuente del pie, consta de una desviación del eje del primer dedo con respecto al primer metatarsiano. El resultado de un hallux valgus puede ser más efectivo con un diagnostico y tratamiento precoz.

¿Por qué la cirugía?

Los tratamientos conservadores de muchos problemas de los pies (plantillas, vendajes, siliconas…), generalmente producen una mejoría temporal, sin embargo, si la deformidad o el dolor persiste, la cirugía es la solución definitiva y además preventiva de alteraciones más importantes que se podrían dar con el paso del tiempo.

Aconsejamos operar los juanetes cuanto antes, bien por dolor o bien en cuanto empieza a afectar al dedo adyacente. Cuanto menor es la deformidad, la técnica quirúrgica es menos agresiva y mejores los resultados. Utilizamos técnicas contrastadas dentro de la comunidad científica, y en el caso de los juanetes, consideramos importante corregir la deformidad, no cortar ni desgastar hueso, sino recolocar la articulación para asegurarnos buenos resultados en el futuro.

¿Requiere la cirugía del pie siempre hospitalización? ¿Que tipo de anestesia se emplea?

No necesariamente. Una gran parte de la cirugía puede realizarse extrahospitalariamente, bajo anestesia local, anestesiando solamente la zona a intervenir, de forma que el paciente puede volver a su domicilio después de la intervención.

¿Que problemas se pueden tratar con la cirugía ambulatoria?

Juanetes, dedos en martillo, neuromas (N. de Morton), callosidades dolorosas en dedos y en la planta, uñas que se clavan, bursitis, gangliones, espolón calcáneo, fascitis plantar, metatarsalgias…..

¿Se requiere cuidados especiales después de la cirugía?

Con cirugía ambulatoria el paciente puede caminar inmediatamente. Nuestro centro realiza un control semanal de los pacientes operados y un seguimiento de los protocolos posquirúrgicos. Los pacientes precisan un calzado posquirúrgico durante unos 15 días y seguidamente comienzan con un tipo de calzado blando. Muchas veces tratamientos fisioterápicos o pequeñas plantillas ayudan a que el resultado sea más satisfactorio.

¿Si ha sido operado y los resultados no son satisfactorios, se puede volver a operar?

Las personas que han sido intervenidas con técnicas inadecuadas, cuyos resultados a medio o corto plazo no son los esperados e incluso presentan más dolor que antes de ser operados, se pueden volver a operar. Aconsejamos realizar una consulta para buscar la solución más adecuada.

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